Si… AD y Copey, la misma vaina es. Obama, peor que Bush es.
¡Helen Thomas, un digno, valiente y ejemplar final! Otra víctima del sionismo.
Por Sabino Barroso Pimentel
La camarada Vanessa Davies, siempre tan bien informada y al día, inició su programa Contragolpe, de hoy, 07 de junio de 2010, dando una noticia de Prensa Latina (y del New York Times), de la que comentó que seguramente sería un escándalo fuera de las fronteras de Estados Unidos y no dentro, porque esto está ocurriendo con la anuencia de la Casa Blanca, del presidente Barack Obama: Helen Thomas fue obligada a retirarse (de la Sala de Prensa de la Casa Blanca) luego de opinar a favor de la causa Palestina y en contra del Estado de Israel.
Por su parte, Walter Martínez, extrañamente, se refirió al atropello consumado en contra de la longeva Helen Thomas, al cierre de su programa. Dijo Martínez que en Washington hubo un sacudón en la conciencia de la prensa, pues Robert Gibbs (vocero de la Casa Blanca) al fin se dio el gusto de ir contra Helen Thomas, que a sus 89 años sigue siendo la conciencia del periodismo en Washington, y que lo tenía a monte a él y a todos desde hace más de 40 años. Ella se preguntó que por qué los israelíes no se van al diablo de Gaza, eso pertenece a los palestinos, ¿por qué no vuelven adonde deberían irse? Y agregó, bueno, deberían irse a Polonia, a Alemania, a Estados Unidos de América.
Veamos una pregunta de Helen Thomas, al genocida Bush: Su decisión de invadir a Irak les ha costado la vida a miles de americanos e iraquíes, y cada razón que dio ha resultado falsa. ¿Por qué quiso ir a la guerra en realidad?, le espetó Helen Thomas, sin pestañar, a George W. Bush. Y, éste, con el mayor descaro, le respondió: Su premisa con todo respeto a usted y su pregunta… Yo no quería una guerra. Asumir que yo quería una guerra es un error, Helen. Con todo respeto. Helen, trató de repreguntar y Bush, no se lo permitió.
Helen Thomas, es una testigo de excepción de los intríngulis de la política de los Estados Unidos, puertas adentro de la Casa Blanca. Presenció la juramentación de John Fitzgerald Kennedy; de Richard Nixon; de Jimmy Carter; de Ronald Reagan; de George Bush (padre); de Bill Clinton; de George W. Bush y de Barack Hussein Obama. Helen Tomas, ha sido reportera en Washington, D.C., por más de 60 años, y desde muy joven, a pesar de su irreverencia, gozaba de la simpatía de los distintos presidentes de EE.UU., a excepción del genocida, alcohólico y adicto de George W. Bush, y de Barack Hussein Obama, por lo que informó Vanessa y confirmó Walter Martínez. Ocupaba en la sala de prensa, de la primera fila, de los periodistas de la Casa Blanca, el asiento central.
Helen Thomas, al referirse a sus padres afirma que tenían un gran sentido de la justicia, aunque no sabían leer ni escribir. Explica su vocación de reportera en los términos siguientes: Recuerdo que cuando era niña, vino una amiga a casa y le hice muchas preguntas, y me dijo: “¡Qué inquisitiva!”. No sabía qué quería decir esa palabra y le pregunté a mi hermana. “Que eres curiosa y deberías de dejar de preguntar esas cosas”. He preguntado desde entonces. Sus padres eran sirios y emigraron a Estados Unidos en 1890.
El cuerpo de prensa de la Casa Blanca es un grupo elite de periodistas con acceso a la presidencia y en él no tenían cabida las mujeres. En 1960, se sumaron muchas periodistas a cubrir la campaña electoral. Helen Thomas, fue asignada a cubrir a los Kennedy, y se refiere a los Kennedy, porque el foco noticioso estaba sobre la glamorosa Jacqueline. Cuando Helen Thomas, comenzó a cubrir la Casa Blanca, ella afirma que… había un acuerdo entre caballeros en el que los periodistas no tocaban las vidas privadas de los funcionarios públicos, mucho menos del Presidente, hasta que lo que él (Nixon) hizo fue tan horrendo, que tuvo impacto en sus responsabilidades y deberes.
La referencia que hace la reportera Thomas, de Bill Clinton, desnuda crudamente la realidad que envuelve a los presidentes gringos: El presidente Clinton no entendió que la ultraderecha de este país le negaba su legitimidad como presidente, y nunca le dio un segundo, un momento, para imponerse. Estaban constantemente sobre él, investigándolo. Lo cual se puso de manifiesto con el affaire Mónica Lewinsky. Al respecto Helen Thomas, sostiene que; No entiendo cómo soportó lo que soportó. Le hicieron muchísimas preguntas personales que nunca… A ningún presidente lo habían sometido a esa tiranía.
Que similar a los ataques desencadenados en contra de un hombre de la talla moral del Presidente Hugo Rafael Chávez Frías, hoy cobarde y vilmente denostado por el asustadizo golpista, oligarca y fascista Lope Mendoza, encargado de la presidencia de Fedecámaras, entre otros personajillos de la derecha. Esa rata de dos patas, Lope Mendoza, estuvo metido hasta el fundillo en el golpe del 11-A, pero el culillo lo hace mentir y dice que Fedecámaras, no es golpista y que no sobrevivirá, sino que prevalecerá, mister Lope Mendoza vaya usted al carajo. Ya el Comandante dijo que Fedecámaras NO hace falta en esta Venezuela revolucionaria que hace rumbo franco al socialismo.
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